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Pueblos Vivos Cuenca protesta en un acto en presencia de las distintas administraciones y organizaciones que apoyan la ganadería industrial

Desde la Plataforma Pueblos Vivos, se hace una llamada a toda la población de la provincia, para proteger nuestro territorio natural ante ésta invasión, que quiere convertir Cuenca en el estercolero de España.

Lunes, 17 de diciembre de 2018

Medio centenar de vecinos de diferentes plataformas vecinales conquenses, agrupadas en torno a Pueblos Vivos Cuenca, protestaron el pasado viernes frente a la sede de la organización agraria ASAJA de Cuenca para manifestar su rechazo al apoyo que tanto esta organización como políticos de diferentes administraciones públicas y partidos están haciendo al sector porcino industrial, un sector que está implantando decenas de macrogranjas en la provincia de Cuenca.

La protesta se ha producido a propósito de la Asamblea General y comida navideña de ASAJA, a la que asistieron, entre otros, el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán; el presidente de la Diputación Provincial, Benjamín Prieto; el ex ministro de Justicia y diputado del PP por Cuenca, Rafael Catalá, el secretario general de ASAJA de Castilla-La Mancha, José María Fresneda. 

La protesta tuvo lugar en la antigua carretera de Madrid, frente a la sede de ASAJA Cuenca, desde la 13:00 a las 15:00 de la tarde. En ella, vecinos afectados por los proyectos y construcción de macrogranjas en Mota del Cuervo, Villar de Domingo García, Cañete, Cardenete, Yémeda, Villalba de la Sierra y Zarzuela expresaron su indignación y repulsa a las políticas públicas de las distintas administraciones en favor del desarrollo del sector porcino industrial, cuyas consecuencias para el medio natural ya se han podido constatar en algunas comarcas, como en la zona de Huerta de la Obispalía, donde el acuífero está contaminado por los nitratos de los purines de varias explotaciones industriales porcinas, además del escaso empleo generado por este sector como se puede comprobar analizando los datos demográficos de los municipios donde esta industria está implantada desde hace años, como Garaballa, Ossa de la Vega o la propia Huerta de la Obispalía.

Las plataformas vecinales de Cuenca siguen denunciando con este tipo de acciones el desamparo de los pueblos frente a esta industria contaminante, como ya ha ocurrido en otras comunidades como Cataluña y Aragón. Por ello, continúa la celebración de charlas, mesas informativas, reuniones con representantes políticos, manifestaciones y concentraciones. Este grave problema ya ha sido denunciado ante el Parlamento Europeo, por los graves incumplimientos de normativa medioambiental, en una jornada celebrada el pasado mes de noviembre en Bruselas a la que asistieron cerca de una treintena de personas de pueblos afectados de nuestra provincia.

Precisamente, en dicha jornada en el Parlamento Europeo las organizaciones agrarias COAG y UPA mostraron su total rechazo a la industria porcina por la falsa creación de empleo y el perjuicio que en realidad hacen a la agricultura y ganadería locales. Esta posición es totalmente opuesta a la manifestada por ASAJA, que sigue defendiendo los proyectos “macro” impulsados por grandes empresas cuyo crecimiento se caracteriza por una alta dependencia del mercado exterior (Rusia, China, etc), y bajos costes de producción, lo que conlleva empleo precario, carne barata y nula gestión de residuos, lo que está convirtiendo a Cuenca en el estercolero de España.